A más de 3.700 metros de altitud sobre el río Apurímac, en el Cusco peruano, se encuentra el puente Queswachaca, una importante
herencia de la cultura inca que se ha mantenido en uso durante al menos 600 años.
Este puente de soga ha sido tejido a mano generación tras generación por las familias de la zona, gracias a un conocimiento ancestral que ha sobrevivido al tiempo y los cambios culturales. De este modo, visitar el lugar es como un viaje en el tiempo a los caminos y puentes de los incas.
Pero, ¿cuál es la historia detrás de esta increíble estructura? ¿Quién construyó el puente y con qué objetivo?
La historia del puente de Queswachaca
Los caminos y puentes de los incas eran una parte esencial de la vida comunitaria, ya que
permitían a los pueblos atravesar la cordillera de Los Andes (que se caracteriza por ser muy accidentada) y tener contacto con otras comunidades.
El Queswachaca cumplía esta importante función en un área que comprende las comunidades de Huinchiri, Chocayhua, Chaupibanda y Qollana Quehue, aproximadamente a 3 horas y media de Cusco. Hoy se conoce por ser el único de su tipo que sigue en pie y todos los años, a finales de mayo, las familias se reúnen para trabajar en su renovación.
Lo más increíble de este proceso es que se trata de una técnica heredada por transmisión oral. Los antiguos pobladores enseñaron el proceso a sus hijos, quienes pasaron el conocimiento a la generación siguiente. Como resultado, cada año se repite esta tradición de 6 siglos en la que participan hombres y mujeres, ancianos y niños.
¿De qué está hecho el puente Queswachaca?
Los materiales necesarios para la renovación del puente tienen un origen tan impresionante como el resultado final. Se trata de una fibra vegetal llamada qoya ichu que las comunidades deben recolectar a más de 4.000 metros de altura, ya que se encuentra en el altiplano andino.
Luego, este forraje se convierte en soguillas que son trenzadas para dar forma y consistencia al puente. Cada soguilla tiene aproximadamente 2 centímetros de diámetro, y cada familia es responsable de entregar 50 brazadas al maestro constructor.
En el proceso también se utilizan otros materiales como ramas, hojas y cuero de res para los pasamanos y la alfombra del puente, cuya entrega significa que la estructura está lista para ser inaugurada.
¿Cómo llegar al puente de Queswachaca?
Para visitar este increíble monumento de la historia incaica, la ciudad más cercana es Cusco, a unos 157 kilómetros.
Saliendo desde aquí, la
vía más rápida es la carretera 3S. Más adelante, siguiendo esta ruta se toma la CU-1627 y, luego, la CU-1637 hacia la Carretera 34F.
Luego, será necesario tomar la CU-126 en Yanaoca y seguir el camino.
Queswachaca tours: una experiencia mágica
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